Anantara Villa Padierna

Perfect, will come again next year!

Très bel hotel de luxe dans un bel environnement de verdure . Chambres parfaites (spacieuses , fonctionnelles, élégantes) Literie très confortable. Restauration de très bon niveau mais à des prix exorbitants. Service discret mais efficace. Seul point négatif le Spa. Si vous n'allez qu' à la piscine intérieure (d'ailleurs assez petite et ne disposant d'aucun transat faute de place ) on ne vous donne ni peignoir ni claquette. Il faut descendre ave le peignoir de la chambre -(et les pantoufles ..) Du jamais vu pour nous dans un hôtel de ce niveau.

El mundo del alojamiento del gran lujo ha cambiado radicalmente en las últimas décadas, la evolución de los grandes resorts de Las Vegas o el Caribe, se unió al lujo oriental de los del sudeste asiático, cristalizando en los super resorts de los Emiratos en general y de Dubái en particular. Este hotel juega en esa liga y con eso está dicho casi todo. Una finca soberbia, con constantes reminiscencias a lo que fue la villa Adriana, donde naturaleza y arte se complementan perfectamente con el edificio. El viajero encontrará múltiples y bellos lugares para Instagram, desde la impresionante piscina, al precioso y cómodo campo de golf. Pero junto a la finca, también se debe destacar un gran equipo humano, volcado en hacer tu estancia inolvidable, especialmente en recepción, desayuno y el mantenimiento y limpieza de las habitaciones. Quizás en algún otro departamento se deberían contagiar del espíritu de los anteriores. La experiencia del desayuno es soberbia, por encima de los estándares de un cinco estrellas gran lujo. Productos de primera, menú preparado al momento, bebidas de calidad, empezando por los zumos naturales y con unas vistas preciosas. Se hace muy complicado levantarte de la mesa… La comida de calidad, pero cuidado, hay algún restaurante que no tiene cocina propia, ni cerca, como el del club de golf y, por tanto, los tiempos de espera pueden ser altos, preguntar antes. Quizás un sistema de pedidos por tablets en ese restaurante solventaría completamente esa cuestión. Mención aparte merece el spa, completamente tematizado donde, tras cada puerta, encontrarás un espacio que te sorprenderá, desde un templo griego, una mezquita otomana, un palacio hindú, una domus romana, hasta la más bella sauna finesa. El spa es como para vivir en él y una garantía de que incluso con mal tiempo lo pasarás estupendamente. En resumen, experiencia de 10 garantizada.

Maravilloso si buscas tranquilidad y relax, en un entorno precioso. Hosteleria fuera de lo normal, cenas super románticas